sábado, 29 de noviembre de 2008

Cine con discapacidad. Hoy: "Cube"

¿Cómo va todo? Yo bien, aunque ya estoy de exámenes, así que no se puede decir que esté muy contento. Tampoco es que me preocupen mucho los exámenes, la verdad, pero bueno, siempre hay cierta inquietud cuando se acercan, ¿no?

Bueno, hoy iniciamos aquí en El Faro una sección nueva. Tratará sobre medios audiovisuales en los que aparezca alguna persona con discapacidad intelectual. ¡A ver qué os parece!

No será una sección que haga yo, porque tendremos un par de colaboradores que nos hablarán de esto de vez en cuando, pero hoy haremos una excepción y hablaré yo de una película que, particularmente, me gustó mucho.

Se trata de "Cube" .
Aquí tenéis un enlace a la peli: http://www.filmaffinity.com/es/film741341.html

"Cube" es una película de miedo que trata sobre un grupo de personas que, sin comerlo ni beberlo, aparecen de repente en una habitación cúbica, que está conectada mediante compuertas con otras 6 habitaciones (y estas a su vez a otras 6, y a otras 6, y a otras 6...). No se conocen entre ellos, no saben cómo han llegado hasta allí, y lo más importante, no saben dónde están ni cómo salir, ya que en algunas de las habitaciones hay trampas. Juntos tendrán que cooperar para poder entender el Cubo y tener alguna posibilidad de salir de allí con vida.

A parte de ser, a mi entender, un peliculón, una de las cosas más interesantes de la película es que, una de las personas que se encuentran allí es autista. Imagináos: gente corriente luchando por su propia vida, de repente se encuentra con una circunstancia añadida: que tienen que preocuparse por lo que haga o deje de hacer una persona con discapacidad.

Al principio no cae demasiado bien el personaje de Kazan (la persona con autismo) entre los demás personajes. La mayoría lo ve como un estorbo para la consecución de su objetivo, lo tratan como un tonto y en definitiva lo dan un poco de lado. Lo malo viene después, cuando la cosa se tuerce a peor y cada cual decide luchar por su propia supervivencia, sin importarles nada de nada los demás. La ley del más fuerte, vamos.

Es ahí, precisamente, cuando la vida de todos corre más peligro, porque dejan de cooperar, y como todo el mundo sabe, la unión hace la fuerza.

"Cube" tuvo varios galardones, como el premio al mejor director en el festival de Sitges del '99 o a la mejor película en Toronto '98 y Oporto '99.

Si la queréis ver, está disponible en la biblioteca de Talavera. Yo os la recomiendo, aunque eso sí, es para mayores de 18 años, ya que es una peli de miedo, no lo olvidéis.


Un tráiler de la peli.
¡Hola xiquetes y xiquetas! ¿Qué tal estáis? Yo bien, pasando un frío impresionante cada mañana, pero bueno, es lo que tiene estar en noviembre.

Bueno, hoy os escribo no para hablaros de las personas con discapacidad ni nada de eso, sino para hablaros de nosotros mismos. Nosotros mismos como personas y como jóvenes, que es lo que somos, al fin y al cabo. Y es que está muy bien preocuparse de nuestros familiares con discapacidad y tal, pero no hay que olvidar que nosotros también respiramos.

Este es un blog de Hermanos, y yo al menos quiero saber cosas sobre vosotros ¿Qué os gusta? ¿Qué os motiva? ¿Cuáles son vuestras inquietudes? Y es que más allá de ser Hermanos, somos jóvenes y tenemos mil cosas que contarnos.

En la columna de la derecha de este blog, iré poniendo enlaces de cosas que nos gusten, empezando por mí, para que me podáis conocer un poco mejor. Espero que vosotros también colaboréis y me contéis cosas!


Una canción de Alejandro Sanz que me gusta mucho

martes, 11 de noviembre de 2008

¿Las personas con discapacidad intelectual están condenadas a ser bebés de por vida?

Wola nenes y nenas! ¿Cómo os va? Yo bueno, un poco depre, siempre me pasa cuando llega el otoño. Será porque ha pasado el verano, será por el frío, será por los estudios, el caso es que el otoño no me gusta. ¡Menos mal que a la vuelta ya están las Navidades! ¡Síííí!

Bueno, pues nada, es la segunda semana de noviembre, y como os prometí, es hora de publicar algo.

Veréis, yo tengo 21 años, y para mi desgracia, ya no soy un niño. ¡Qué más quisiera yo! Que te traten como un adulto es una castaña, por eso de tener responsabilidades y tal, pero qué le vamos a hacer, es lo que hay.

Aunque bueno, la verdad es que sería peor que me tratasen como un crío para toda la vida. Todo el día bebiendo biberones y comiendo potitos de zanahoria. ¿Os imagináis? ¿Tener cuarenta años, y que vuestra mamá no os quisiera destetar? ¿No tener vida más allá del jardín de infancia? Pues hay gente que le pasa, aunque no os lo creáis! Estoy hablando de algunas personas con discapacidad, que en su entorno le protejen tanto que no les dejan ni vivir.

Mirad, mi hermano tiene 18 años, y no es un bebé. Aunque tenga síndrome de down, no es un bebé. Porque los bebés, por definición, no son capaces de hacer nada, y mi hermano es capaz de hacer un millón de cosas (así, sin exagerar). Puede hacer todas esas cosas porque sabe, y sabe hacerlas porque no se le ha tratado como un bebé (excepto cuando era pequeñín, claro). Que tenga discapacidad intelectual no significa que se tenga que tirar toda la vida arrinconado sin posibilidad alguna de volar. Porque una cosa es protegerle y quererle, y otra muy distinta es tratarles como si fuesen vasos de cristal de esos super frágiles. ¿Que se pueden romper? Claro que sí. ¿Y quién no? Como decían en "El rey Leon", ¡el ciclo de la vida!

Que a mi hermano se le deje crecer, se le deje que tenga amigos (y enemigos), que trabaje y que sea útil para la sociedad, no solo es algo natural al 100%, sino que además es una cosa buena para todos.

Mejor para él
Si él siente que no es un bebé, se sentirá más lleno. Y no solo hablo de su vida social, de sus amigos y sus cosas, sino también hablo a nivel intelectual. Que él sepa que hay televisión más allá de "El muro infernal" (programa que nos encanta, a él y a mí), y que vea películas de miedo, o de acción, o vaya a ver una lucha de boxeo o, yo que sé, y que todo eso le guste, repercute en su conocimiento de la realidad y en su inteligencia. Pero si nos negamos a que crezca mentalmente, y le ponemos todos los días y a todas horas a ver "Los Pitufos" , por ejemplo, pues no será tan listo. ¡En la variedad está el gusto! ¿No os parece?

Mejor para los demás
¿Os imagináis que vuestro hermano o hermana con discapacidad no haga nada en casa porque es un "pobrecito"? Si ha crecido siendo un bebé, seguramente se portará como si lo fuera, y cuidar a un bebé toda la vida es algo muy cansado. En cambio, si ha crecido siendo un chicarrón/a del Norte, nos podrá ayudar en muchas cosas. Y eso es lo que mola, ¿no creéis?


"Volar", de Melon Diesel. ¡Me encanta!

domingo, 9 de noviembre de 2008

¡Estuvimos en el congreso de Madrid los días 2 y 3 de Octubre!

Hola, chicos y chicas! ¡Cuánto tiempo! ¿Cómo va eso? Yo bien, aunque bueno, ha empezado el nuevo curso escolar, y a mí eso de estudiar, la verdad es que no me va demasiado. Menos mal que este ya es el último año, ueee!

Bueno, ya hemos arreglado unos asuntillos que teníamos con el blog, y a partir de ahora, os anuncio que este El Faro se va a actualizar más de vez en cuando. Es más, me comprometo a que, a partir de este mes de octubre, la seguna semana de cada mes publicaremos material nuevo. Ya veréis, vamos a hablar de muchas cosas, y muy interesantes todas. ¡Estad atentos!

Hoy, por ejemplo, voy a hablaros de una convención que celebró FEAPS los pasados días 2 y 3 de octubre en Madrid, y a la que tuvimos el gusto de ir. Esta reunión se enmarca dentro de los preparativos para una súper-convención nacional que se celebrará en Valencia en junio del año que viene.Durante dos días, un montón de familiares de personas con discapacidad y profesionales del ramo nos reunimos para acordar los objetivos de la convención de Valencia. Aquello estuvo muy bien. En primer lugar, porque en reuniones como estas, tienes la oportunidad de conocer a familiares que está viviendo una situación similar a la tuya, y a profesionales que pueden ayudarte también, con su apoyo y su sabiduría. Yo era la persona más joven que había allí, y casi el único hermano, pero bueno, de todas formas siempre es bueno compartir experiencias, que te escuchen y que te ayuden.

Llegamos a las 2 de la tarde, y lo primero que hicimos fue… comer, claro (aunque, entre nosotros, yo cocino mucho mejor que los cocineros de allí ¬¬). Allí aprovechamos para empezar a conocer gente; yo en concreto estaba un poco asustadete, porque no conocía a nadie, pero se me acabó pasando.Luego entramos en una sala de conferencias, y nos dieron la bienvenida dos tipos que resultaron ser el gente importante de la asociación: Paulino Azua y Juanjo Lacasta. Nos hablaron de por qué estábamos allí, de otras reuniones que se celebraron antes, de la historia y la pre-historia de FEAPS y de más cosas. Si queréis saber de qué va todo esto, aquí te dejo un enlace.

http://www.feaps.org/confederacion/an100.htm

Después de eso, nos pusimos a trabajar en grupos. Debo confesar que, entre tanto padre, me sentí muy perdido. Se pusieron hablar de cosas que no conocía, pero bueno, luego fui yo y intervine para hablar de cosas de hermanos y eso.

Hubo tres grandes temas a debate. Aquí os resumo un poco cómo quedó la cosa:


- La familia y su proyecto de vida:

Aquí se habló un poco de lo que es la convivencia con la persona con discapacidad, y cosas así.
Por ejemplo, se habló del espacio independiente que deben tener todos en la familia, (no tiene que girar todo en torno a la persona con discapacidad); de la necesidad de respiro de los familiares (¿sabéis que existe un programa de respiro, para que nosotros los familiares podamos salir por ahí sin preocuparnos de nuestro familiar con discapacidad?), o de las ayudas morales que pueden aportar otras familias a gente que se encuentra por primera vez con esta situación.

También hablamos de hermanos (bueno, hablé yo, porque si no, ya me contaréis) Se comentó la necesidad que tenemos de conocer, desde pequeños, lo que le pasa a nuestro hermano con discapacidad, para lo cual quizás también deban intervenir las asociaciones. Se habló de las responsabilidades que debemos tener y las que no (somos hermanos, no padres), o la necesidad de tener una vida propia lejos de nuestra familia. O de que la persona con discapacidad también tiene que vivir su vida, y no se la puede tener en una burbuja para siempre. O que hay que enseñar a los demás familiares (tíos, primos, abuelos…) todos esos valores.


- La familia y su proyecto asociativo

Se habló de la implicación que deben tener las familias con la asociación, y viceversa, que a veces no es tan buena como debería. Se dijo también que el servicio tiene que estar personalizado, porque no todos somos iguales y cada uno tiene sus cosillas.
También hubo tiempo para cosas de las que no me enteré mucho y tampoco creo que os interese, sobre si la asociación debería ser una organización, y tal.


- La familia y su proyecto social

Se concretó que se debía seguir luchando por la visibilidad de las PCDI. No puede ser que los medios de comunicación les traten de pobrecitos, porque entonces todo el mundo les tratará de pobrecitos. Decidimos que no nos podemos conformar con lo que ya tenemos, si eso no implica una igualdad absoluta entre todas las personas. No podemos tampoco tolerar que todas las personas con discapacidad parezcan un “pegote informe”, quiero decir, que cada una es diferente, y si a una le apetece salir por ahí con otras personas sin discapacidad, eso no se debe coartar de ninguna manera.Ya véis, estuvo interesante la cosa! Además, fue una experiencia muy buena. ¡A ver si lo repetimos!